El mundo sonrió al descubrirte
Mar calmo, calor de brisa,
Rápido en alegría
Generoso en amor.

Quemaste el cielo de locuras,
Llamaradas simples de vida,
Claras como al agua libre,
Amplias como su ardor.

Con las visiones hablaste
Para burlarte de sombras
Y con tus precisos gestos
Los abismos pudiste colmar.

Del destino no se conoce el sentido,
Tus ojos se cierran, tu boca se sella,
Tus oídos no escuchan mas,
Pero en mi corazón yo guardo
El recuerdo alegre de tu ser.

Sueña pájaro inmenso
Con las luces que en tus pies
A cada paso se alumbraban.

Sueña árbol inmenso
Con las flores que de tus labios
A cada sonrisa brotaban.

Sueña velero inmenso
Con tus velas que en viento
Dispersan tu risa y tu felicidad.

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