Es un amanecer que malicioso sorprende
Los rostros unidos, los ojos despiertos,
Abrazos que estrechan los cuerpos
Y dos corazones que detienen el amor.

Es una historia que la delicia guarda,
Es la complicidad de un primer ardor.
Son los tropiezos que la vida ordena
Y la sencillez que para amarse queda.

Es la juventud que al cansancio se opone,
Son los recuerdos que al olvido enfrentan,
Es la belleza que con el tiempo perdura,
Es la ternura que los años saben guardar.

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