Es como un instante de tempestad
Cuando la lluvia hiere mi corazón
Y de mis manos se escapa el amor.
Es como una duda, un dolor,
Un tormento que predice la soledad,
Un adiós que ensombrece la razón.
¡Y partirás!
Pero te buscaré, sin descanso te buscaré.
Sin que el tiempo penetre mi cuerpo
Ni el viento doblegue los recuerdos,
Porque, aunque cansada, te buscaré.
Y lejos tal vez estarás
Prisionero de tus temores,
Sofocando de incertidumbres,
Quizás esperando una mano,
Mi mano que te hará regresar.
