No fueron heridas
Que el silencio rompió
Ni suspiros
Que la mañana lastimo.
No fueron temores
Que las noches soñaron
Ni deseos
Que solitarios lloraron.
Fue un recuerdo
Más cálido que tibio,
Un amor
Más distante que cercano.
Pero fueron días de dicha,
Más que de descontento,
Una historia
Que el tiempo apacigua
Y como regalo ofrece al corazón.
