MORIBUNDO

Cubierto estaba su rostro
De barro, humo y hastío.
Le debía la muerte al miedo,
El rencor a los silencios
Y un grito a las ganas de matar.

Su vida se destrozaba,
En lo profundo de su ser
A sus sueños los devoraba
La furia casi animal.

Ni cerrar los ojos valía
Para esta vida esquivar
Dolorosa, siempre enemiga
Que su esperanza quemo.

Cansado, casi moribundo
Su camino para siempre extravió.
Pero es la agonía que impone
El momento de desfallecer.

El tiempo entonces se encargó
De borrar las tristes huellas
Que un cuerpo desnudo dejó.

CC-by-nc-nd

Votre commentaire

Entrez vos coordonnées ci-dessous ou cliquez sur une icône pour vous connecter:

Logo WordPress.com

Vous commentez à l’aide de votre compte WordPress.com. Déconnexion /  Changer )

Image Twitter

Vous commentez à l’aide de votre compte Twitter. Déconnexion /  Changer )

Photo Facebook

Vous commentez à l’aide de votre compte Facebook. Déconnexion /  Changer )

Connexion à %s