La apatía venció
Ilusiones y ternura,
Pero yo no estaba.
Bajaste los ojos,
La ilusión y la ternura
Vencidas, cayeron a tus pies
El desdén ultrajó
Corazón y sentimientos,
Pero yo no estaba.
Al amor diste la espalda,
Tu corazón y tus sueños
Ultrajados, cayeron a tus pies
Y el silencio hablo,
La soledad mataba
Si yo no estaba.
Pero ni mis sueños,
Ni mis sentimientos, ni mi amor
Te rescataban del rencor.
Es por eso, que yo no estaba.
